¿Por qué se consideraron herejes a Juan Wyclif y Juan Hus?
Juan Wyclif (1330-1384) dice que la jerarquía se arroga poderes que no le corresponden, el clero predica lo que no cumple y que el Papa pretende ser dueño del mundo y ejerce autoridad sin ser virtuoso. Es considerado hereje porque afirmaba que sólo la fe salvaba y que esta sólo la concedía Dios por lo que las obras eran superfluas, y consecuentemente rechaza buena parte de los sacramentos. Es una idea preluterana que adquiere tintes más radicales (calvinistas) cuando divide la Iglesia en visible (“mala”, asociada a la jerárquica) e invisible (“buena”, fieles que siguen las doctrinas cristianas) y habla de la comunidad de predestinados. En definitiva se habría adelantado a los reformadores del siglo XVI. Juan Hus (1369-1415) critica el escándalo que supone la venta de indulgencias que Juan XXII había creado para recaudar dinero para su lucha contra el rey de Nápoles por lo que fue condenado como hereje y seguidor de Wyclif (aunque en realidad no compartía algunas de sus ideas alejadas de la ortodoxia). En su juicio solo admitió cuatro proposiciones heréticas, no quiso retractarse por lo que fue condenado a morir en la hoguera. La única autoridad máxima a la que hacía caso era la Biblia; la Iglesia, según él, tenía que ser pobre. También critica la venta eclesiástica de las indulgencias y proclama que deben ser los laicos quienes reformen la iglesia y no la alta jerarquía eclesiástica.
Explique el concepto de "humanismo renacentista".
El humanismo es un movimiento cultural europeo del siglo XV en el que el hombre pasa a ser el centro y medida de todas las cosas, a diferencia del teocentrismo en el que Dios ocupaba ese lugar. La presencia en Italia de numerosos intelectuales bizantinos, que traían consigo numerosas obras de la cultura clásica, dio un impulso importante al interés de occidente por el mundo clásico, particularmente en Italia, donde surgió el Humanismo. La irrupción de las formas y los temas del pensamiento cásico se plasmaron en un mayor cultivo de la literatura y del arte, que con el Renacimiento, alcanzaron la cima de su perfección. Las nuevas formas de pensamiento trajeron grandes cambios, en el ideal político, durante los dos últimos siglos medievales, superados ya los enfrentamientos por el
dominum mundi entre el Papa y el Emperador. Historiográficamente el término humanista se refiere al nombre que los estudiantes de Italia de los siglos XV y XVI daban familiarmente a los profesores de humanidades como opuestos a los de teología, derecho y de artes. Sin embargo, la famosa ruptura con la Edad Media como tradición histórica inmediata y su sustitución por los ideales antiguos no son del todo ciertas ya que nunca se sustituyó una tradición por otra, sino que pervivieron juntas y mezcladas.
¿Por qué Rusia se considera heredera de Bizancio?
Por un lado el patriarca de Moscú reclama el título de sucesor del metropolitano de Constantinopla al frente de la Iglesia ortodoxa, pues este último estaba bajo dominio turco, reclamando para Moscú el título de “tercera Roma”. Por otro, Iván III tenía una concepción imperial conformada por el Imperio Bizantino, cuya posición como cabeza del mundo ortodoxo deseaba ocupar. Este deseo se puede apreciar en algunas de las acciones que llevó a cabo. En 1472 se casó con una descendiente de emperadores Zoé Paleólogo, sobrina del último griego que llevó la corona del Imperio Romano Oriental en Constantinopla. También introdujo en la corte el protocolo áulico de los emperadores bizantinos y tomó el título de césar después de la caída de Bulgaria. En 1503 vencerá a la Horda de Oro, y se nombrará Zar del Imperio Ruso, tomando el relevo del Imperio Bizantino, por lo que se convertiría en el Imperio de toda la ortodoxia. El paso decisivo se dio en 1589, cuando el Patriarca Ecuménico de Constantinopla reinante, entonces un servidor de los turcos, fue inducido o forzado, durante una visita a Moscú, a elevar su anterior subordinado, el Metropolitano de Moscú, al rango de patriarca independiente. En ese momento la iglesia ortodoxa rusa se convirtió de facto en la más importante de todas las iglesias ortodoxas ya que era la más numerosa y la única que estaba respaldada por un poderoso estado soberano.
La expansión territorial de Tamerlán.
Tamerlán fue un notable líder mongol de la dinastía Timúrida que destacó en el terreno militar y es conocido como el último de los grandes conquistadores nómadas del Asia central. Situó su sede en Samarkanda, aunque nunca se invistió como kan (dado que no pertenecía a la familia de Gengis Kan) y a su muerte el territorio conquistado se disgregó. La expansión territorial de este destacado caudillo alcanzó una extensión de ocho millones de kilómetros cuadrados en sólo dos décadas, desde Delhi a Moscú y desde la cordillera Tian Shan (Asia central) hasta los montes Tauro (Anatolia). Sus primeras campañas destacadas fueron las del Turquestán, Irán, Irak, Armenia y Georgia, que supusieron su dominio sobre estas zonas (1370-1385). Intervino, asimismo, en las disputas internas entre los príncipes del kanato de la Horda de Oro, si bien no se anexionó este territorio, ejerció control efectivo sobre el mismo. A partir de 1398 se dirigió también hacia la India, sometiéndola y arrasando Delhi, y hacia Siria, donde tomó y saqueó Damasco, Alepo y Bagdad. La brutalidad de sus campañas no impidió que en occidente y Bizancio se le considerara durante un breve periodo de tiempo como posible aliado frente a los otomanos. Fue significativo su triunfo sobre los otomanos en la batalla de Ankara (1402), sometiéndolos a vasallaje, ya que favoreció la supervivencia del Imperio Bizantino durante casi un siglo más. El mismo año completo la conquista de Anatolia sitiando y tomando la ciudad cristiana de Esmirna en asía menor. Tras su muerte acaecida cuando avanzaba sobre China su imperio se desintegró.
¿En qué consistió y qué se acordó en el Tratado de Alcáçovas de 1479?
El tratado de Alcáçovas fue firmado entre los Reyes Católicos, Isabel de Castilla y Fernando de Aragón y por el rey Alfonso V de Portugal y su hijo Juan en la ciudad portuguesa del mismo nombre en 1479 y ratificado en Toledo al año siguiente. El tratado de Alcacovas-Toledo se centraba en dos aspectos fundamentales: cláusulas relativas a acuerdos matrimoniales y de sucesión y un acuerdo de paz perpetua entre Portugal y España. En cuanto a lo segundo, el convenio incluía algunas regulaciones en torno a la navegación por el Atlántico, de manera que no hubiese discrepancias futuras en el dominio de las rutas atlánticas. Así se reconoció a Castilla la posesión de las Canarias y la prohibición de navegar al sur del cabo Bojador, y a Portugal, su dominio sobre las Azores, Madeira y todo lo descubierto y por descubrir al sur de dicho cabo. De esa manera, los monarcas españoles reconocieron la supremacía portuguesa en África y se comprometieron a no enviar expediciones hacia aquellas zonas sin el consentimiento de los reyes de Portugal. En función de la expansión europea, lo realmente importante de este tratado radica en el hecho que por primera vez las dos coronas que encabezarían este proceso tuvieron que negociar el reparto de los espacios marítimos atlánticos que se estaban abriendo. Asimismo, se sentó un precedente para futuras negociaciones entre España y Portugal, cuyo punto más alto fue el acuerdo logrado en Tordesillas en 1494.