domingo, 15 de marzo de 2015

Paleoetnología de las comunidades mesolíticas de la Península Ibérica (I)


1. Mesolítico y cazadores-recolectores complejos.

Valoración negativa de este periodo por parte de los prehistoriadores debido a posturas evolucionistas basadas en el “progreso”:
  • Consideración del Mesolítico como un mero periodo transicional, sin identidad propia en comparación con la etapa posterior Neolítica => el pico asturiense (fósil director) se veía como un instrumento primitivo tallado con métodos arcaicos.
  • Coincidía con una profunda crisis ecológica que provocó la desaparición de grandes recursos alimenticios => presencia masiva de conchas como representación de una dieta marginal y poco nutritiva.
  • Asturiense como ejemplo paradigmático. 

Nueva percepción del pasado impulsada por la Nueva Arqueología y la Ecología Cultural a partir de los años 80:
  • La humanidad ha evolucionado de una manera progresiva a través de la adaptación.
  • Por tanto para comprender el modo de producción alimentario del Neolítico es necesario investigar el modo de vida de los últimos cazadores-recolectores.
  • Esto significa cambiar la concepción del Mesolítico para acabar con los prejuicios de antaño.
  • Surge así el término “cazadores-recolectores complejos” (más información en el simposio de Chicago Man the Hunter de 1966).

Condiciones  identificadas en la complejidad cultural de los cazadores-recolectores:
  • ASENTAMIENTO => Organización social a partir de bandas extensas (macro-bandas) que reúnen un amplio número de individuos.
  • SEDENTARISMO => Reducida movilidad residencial por la permanencia prolongada en campamentos base (poblaciones semi-sedentarias o sedentarias).
  • TERRITORIALIDAD => Organización socio-territorial basada en la territorialidad (monopolización del territorio).
  • ECONOMÍA => Subsistencia alimentaria basada en la “economía de amplio espectro” mediante una dieta diversificada a partir de recursos de niveles tróficos inferiores.
  • ALMACENAMIENTO => Planificación aplazada del consumo de alimentos basada en métodos como la conservación y el almacenamiento.
  • TECNOLOGÍA => Base tecnológica especializada caracterizada por la diversidad y por la rentabilidad del trabajo.
  • REDES SOCIALES => En ciertos casos presencia de algunas asimetrías sociales que motivan rangos iniciales de estatus individual.


2. Las conductas territoriales.

2.1. El patrón de poblamiento litoral

El poblamiento mesolítico peninsular se caracterizó por la ocupación prioritaria de la alargada franja litoral, una pauta de poblamiento compartida por otras partes del continente europeo. También se han hallado yacimientos en las zonas interiores aunque representan ocupaciones aisladas poco relevantes.

Densidad de poblamiento dispar en la franja costera:
  • Vertiente mediterránea => patrón de poblamiento lineal sumamente disperso.
  • Vertiente atlántica => alternancia entre territorios densamente ocupados y territorios casi deshabitados.
  • Costa cantábrica => misma alternancia entre territorios densamente habitados y territorios con poca ocupación. 

Requisitos imprescindibles para que los territorios puedan sostener altas densidades de población desde una perspectiva antropológica:
  • ABUNDANCIA de los recursos alimentarios.
  • DIVERSIDAD de las fuentes de alimentación.
  • DISPONIBILIDAD de recursos durante buena parte del año (predictibilidad). 

La adaptación medioambiental puede explicar la concentración de población en las franjas costeras:
  • Mayor número de recursos porque atraían las grandes manadas y permitían la proliferación de las masas vegetales.
  • Gama más amplia de alimentos  porque presentaba mosaicos naturales complejos (bosques, llanuras, pastos, matorrales, acantilados, playas).
  • Posibilidad para combinar recursos a lo largo del año porque allí se reunían de manera estacional algunos importantes recursos alimenticios.

Sin embargo la realidad pudo ser algo más compleja y variar incluso en el plazo de unos pocos cientos de años:
  • Concheros más antiguos del Tajo-Sado (10.000-7.500 B.P.) => poblamiento de carácter lineal ceñido al borde litoral.
  • Concheros más recientes (7.500-6.000 B.P.) => patrón de poblamiento más interior con un carácter más extensivo.

2.2. Entre el nomadismo y la sedentarización

Uno de los cambios más relevantes acaecidos en los tiempos postglaciales consistió en la restricción de los hábitos nómadas, es decir, los cazadores-recolectores fueron reduciendo sus desplazamientos a larga distancia y aumentando el carácter residencial de sus estancias para convertirse en bandas más sedentarias. Redujeron su movilidad residencial y su movilidad logística.

Características de la reducción de la movilidad residencial y logística:
  • No significa un abandono definitivo de la vida nómada.
  • Una riqueza ecológica sustancial, una notable diversidad ambiental y una buena disponibilidad de recursos durante gran parte del ciclo anual provocaron la sedentarización.
  • Alto nivel de sedentarización en las poblaciones asturienses (Geoffrey Bailey) y en los concheros portugueses.
  • Comunidades portuguesas => habitaba campos-base semipermanentes, desde donde se desplazaban en temporadas más templadas hacia la costa y de manera más esporádica hacia campamentos temporales efímeros del interior.

2.3. ¿Existieron bandas territoriales?

Territorialidad:
  • Implica el uso privilegiado de un territorio para controlar los recursos de subsistencia mediante una planificación adecuada.
  • Puede considerarse como germen de una especie de propiedad comunal, y por tanto como uno de los criterios básicos que iniciaron el largo camino hacia la complejidad cultural (funcionalismo) o como una de las causas que motivaron originariamente la conflictividad social (marxismo).
  • Motivos => competencia por los recursos locales y necesidad de garantizar un suministro de alimentos estable.
  • Actualmente no existe mucha documentación para discernir los rasgos más básicos de la territorialidad de las bandas.

Concheros asturienses:
  • Clara segmentación territorial entre las poblaciones interiores y litorales a juzgar por las discrepancias en las dietas (Manuel González Morales).
  • Las bandas costeras controlaban los pequeños territorios litorales de manera excluyente, pues impidieron que las bandas del interior se internasen por las costas para saborear los alimentos marinos.
  • Esta competencia territorial revelaría una situación de estrés social.

Concheros portugueses:
  • Dieta mixta constituida a partes iguales por alimentos terrestres y acuáticos.
  • Sin embargo no existen pruebas convincentes para confirmar los patrones de territorialidad de las bandas.

Península Ibérica:
  • No se ha detectado muertes violentas entre las comunidades mesolíticas peninsulares, un escenario que sí se ha registrado en culturas septentrionales.
  • No se ha registrado indicios de exhibición de códigos simbólicos, una manera habitual entre las sociedades cazadoras-recolectoras para la limitación territorial.

Fuente: MENÉNDEZ, M.; et. al., (2012). "Prehistoria Antigua de la Península Ibérica". UNED. Madrid.

No hay comentarios:

Publicar un comentario